jueves, 21 de mayo de 2015

Nuestra Señora del Rocío

Madre de Dios y Madre Nuestra, Virgen del Rocío,
a quien con devoción veneramos,
en la entrañable advocación del Rocío:

Manifiesta a tus hijos tu ternura,
amparando a quienes hoy, te invocan de todo corazón.

Socórrenos en nuestras necesidades,
consuélanos en nuestra aflicción.

Danos el auxilio de tu ayuda
para salir del pecado.

Y alcánzanos del Señor el perdón de las muchas culpas,
con que hemos ofendido a tu Hijo Jesús.

Señora Madre Nuestra:
Intercede por nosotros,
para que, libre de los males espirituales y temporales,
sirvamos a Jesús en Santidad y justicia,
todos los días de nuestra vida.


Así, bajo tu amparo y patrocinio,
llegaremos a tener parte contigo
en el gozo del reino de los Cielos.
Amén.