Reflexionando sobre el evangelio que leímos ayer...
Jesús no va por la vida juzgando a las personas, al
contrario, lo que transmite con su forma de vivir es perdón, cariño, respeto y
comprensión.
Jesús se encontró con personas que vivían apartadas (ya lo
sabemos: pecadores públicos, prostitutas, pobres enfermos), pero también se
reunió con gente de bien, como Nicodemo, alguien con formación y buena
posición, pero que no entendía de qué iba Jesús.
La solución: Nacer de nuevo, formatear el corazón,
convertirse…
Piensa un poco: qué necesitas formatear de tu vida porque
hace que no funciones bien. Quizá sea en tu casa, o con tus amigos, tu clase…
Dejamos un minuto de silencio